Un ensayo clínico de fase 2 liderado por el Instituto del Cáncer Dana-Farber y varios centros importantes de tumores cerebrales está revolucionando la búsqueda de nuevos tratamientos para el glioblastoma, el tumor cerebral primario más común. El ensayo, llamado INSIGhT (Ensayo de Cribado Individualizado de Terapia Innovadora para el Glioblastoma), es el primero de su tipo en neuro-oncología y tiene como objetivo identificar rápidamente terapias beneficiosas para los pacientes.
Tradicionalmente, las terapias en investigación para el glioblastoma se prueban individualmente contra la terapia estándar o en ensayos de brazo único. Sin embargo, INSIGhT utiliza un enfoque diferente al utilizar un brazo de control compartido para probar simultáneamente múltiples terapias en investigación. Este diseño es más eficiente y rentable que realizar ensayos separados de fase 2 aleatorizados. Hasta ahora, el ensayo ha probado un brazo de control de terapia estándar contra tres tratamientos: abemaciclib, neratinib y CC-115.
El ensayo utiliza una estrategia llamada Aleatorización Adaptativa Bayesiana, donde se aplica continuamente un análisis estadístico complejo para aprender de la respuesta de cada paciente. El algoritmo adapta el ensayo en función de los resultados de los pacientes, asegurando que los futuros pacientes tengan una mayor probabilidad de recibir el tratamiento más beneficioso. Este enfoque reduce el número de pacientes expuestos a terapias ineficaces y acelera la identificación de tratamientos prometedores.
Los resultados iniciales del ensayo, publicados en el Journal of Clinical Oncology, mostraron que abemaciclib y neratinib prolongaron la supervivencia sin progresión en comparación con la terapia estándar y CC-115. Sin embargo, ninguno de los tratamientos mejoró la supervivencia general.
INSIGhT es un ensayo en evolución que continúa agregando nuevos brazos de tratamiento. Actualmente, los nuevos pacientes se asignan para recibir una quimioterapia novedosa penetrante en el cerebro, un régimen de inmunoterapia o terapia estándar. El ensayo también requiere la secuenciación genómica del tumor para todos los pacientes para comprender mejor la influencia de los biomarcadores genéticos en la respuesta al tratamiento.
Este ensayo innovador no solo proporciona un enfoque más eficiente y simplificado para encontrar nuevos tratamientos para el glioblastoma, sino que también facilita una mejor comprensión de por qué los pacientes responden o no responden a diferentes terapias. Tiene el potencial de impactar significativamente la búsqueda de terapias efectivas y mejorar los resultados para los pacientes con esta enfermedad desafiante.
Fuentes:
– Instituto del Cáncer Dana-Farber
– Journal of Clinical Oncology, doi.org/10.1200/JCO.23.00493